Apocalypto es criticada por investigadores

Distorsiona a la sociedad maya (se ve borrosa)
Gibson cayó en enormes errores históricos, aun cuando asegure que para escribir el guión de esta cinta se basó en el libro escrito por el franciscano Diego Landa (yes indeed).

Sin censurar ni criticar la producción, la fotografía o la acción de de la película Apocalypto, dirigida por Mel Gibson –la cual por cierto, logra su objetivo al mantener atento al espectador la mayor parte del tiempo–, miembros del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) cuestionan los errores históricos que comete esta cinta, basada “en el ocaso de la cultura maya”.
No debió manejarse tan a la ligera la historia de la milenaria civilización maya. Uno puede escribir ficciones, pero dentro de éstas hay ciertas reglas, sobre todo si se enmarcan en un contexto histórico, precisa el arqueólogo Luis Alberto Martos López, director de Estudios Arqueológicos del INAH (los burócratas saben de como "adherirse" a las reguorias, a poco no??).
“Por lo general al realizar este tipo de trabajos, los guionistas suelen caer en estereotipos que no reflejan una realidad”, dice el investigador. En primer lugar la película descontextualiza la historia, muestra a los mayas como una sociedad violenta, sin aludir siquiera a su desarrollo astronómico y científico (eso SÍ VENDE, wey, oseaaaa, jajaja). Combina elementos que no son propios de la época en que Mel Gibson sitúa su narración fílmica: durante la llegada de los colonizadores españoles a tierras mayas.
Gibson cayó en enormes errores históricos, aun cuando asegure que para escribir el guión de esta cinta se basó en el libro escrito por el franciscano Diego Landa –de quien se sabe que a su arribo a estas tierras destruyó todo los vestigios escritos por los mayas. El cineasta muestra los sacrificios de los esclavos desde la cúspide de una pirámide, donde se les extrae el corazón y sus cuerpos decapitados son lanzados por las escaleras del gran templo (yeaaah!!!). “Ello no quiere decir que no hubiera sacrificios, pero su concepción era muy distinta a la manera en que la presenta esta película (Sólo les cortaban del cuello, pero no aventaban lo demás, saz). Este tipo de sacrificio más bien lo practicaban los mexicas en el Templo Mayor, donde incluso se ha localizado una piedra destinada a los sacrificios.”
Imprecisiones
Hasta hace unas décadas, la imagen de los mayas era la de un pueblo avanzado que había sido el inventor del “cero” (y el cerote, ese no); esa imagen cambio luego de que hallazgos arqueológicos demostraran su espíritu guerrero, rebasado en la película Apocalypto (por la derecha o por la izquierda el rebase, digo, para saber).
También Roberto García Moll, presidente del Consejo de Arqueología (montoneros jijos de sushi), se refiere a las imprecisiones históricas de este filme. En defensa de los mayas presentados en la cinta como una civilización violenta, el experto indica que esa práctica no sólo fue común entre los seguidores de Kukulcán (pos no que no?? caones estos habladores), sino de todas las culturas del mundo, incluida la romana.
García Moll –quien desde 1973 encabeza un proyecto de investigación en la zona arqueológica de Yaxchilán–, hace algunas precisiones. La película distorsiona la historia porque presenta a los españoles como los salvadores de los “salvajes” pueblos mayas, cuando el arribo de estos personajes a Mesoamérica no fue el motivo de la decadencia de los mayas –como sucedió en el Altiplano central, donde hubo una conquista y el sometimiento de diferentes pueblos.La manera en que se presentan los sacrificios en la película carece de sustento, confirma este investigador. No obstante, hay representaciones en Tikal de algunas ofrendas humanas. Ahí se pueden observar que los individuos eran sacrificados por flechamiento o por lanza, aunque a algunos se les extraía el corazón. “El problema –concluye García Moll– ha sido ver a los grupos mesoamericanos fuera del contexto mundial.” (globalifobia fílimica??? eje judeomasónico?? hablaron los grillos que buscan stones & bones)



México • Leticia Sánchez/Mileño
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Me quedo con el comentario de Carlos Marín, en el mismo diario: "Si los “ofendidos” supieran de historia (aunque sólo vieran La reina roja, de Nacional Geographic), constatarían que los mayas (con todo y su Cero) eran tan sanguinolientos como los vikingos, los incas, los persas, los romanos, los judíos, los chinos, los mexicas, los gurkas o los zapotecos."